El Hotel Boutique «Casa del Médico» abre sus puertas en Alcázar de San Juan
El Hotel Boutique «Casa del Médico» abrió sus puertas en una ceremonia de inauguración celebrada ayer por la tarde. Este proyecto familiar, compuesto por nueve habitaciones, tiene como objetivo convertirse en un referente en alojamiento en Alcázar de San Juan, además de ser un lugar distinguido para albergar eventos y reuniones de trabajo. El nombre «Casa del Médico» surge del enfoque del proyecto, el cual se basó en la restauración de la antigua casa de un médico, conservando múltiples elementos que permanecían intactos en la edificación, logrando así un equilibrio entre modernidad y respeto por lo tradicional.
La alcaldesa Rosa Melchor asistió al evento de inauguración, acompañando a Jesús Fernández, consejero de Sanidad, Ana Isabel Fernández, directora general de Turismo en Castilla-La Mancha, y a Carlos Ortiz, quien, junto a sus padres, ha creado esta pieza turística única.
Rosa Melchor expresó su entusiasmo por presenciar la evolución de este proyecto desde sus inicios, destacando la experiencia como un viaje al pasado, conociendo la forma en que se vivía y se ejercía la medicina a mediados del siglo pasado: «Me hizo mucha ilusión cuando me explicaron lo que querían lograr y quiénes eran los impulsores de este proyecto. Tuve la oportunidad de conversar con Carlos y él representa una nueva generación que se suma a aquellos alcazareños que triunfaron fuera de Alcázar pero nunca olvidaron sus raíces, y siguen apostando Alcázar de San Juan».
Por su parte, Ana Isabel Fernández, directora general de Turismo en Castilla-La Mancha, felicitó a la familia y destacó la importancia de que personas preparadas inviertan en su propio municipio: No sólo es un hotel, sino que tiene ADN de Alcázar de San Juan, el interiorista es de aquí y todo el equipo que ha trabajado en esta casa, y creo que esto tiene un valor añadido extraordinario».
El consejero de Sanidad, Jesús Fernández, señaló la importancia histórica de este proyecto y su conexión con el pasado: «Esto nos da una idea de cómo en el siglo pasado vivían los que ejercían esta profesión, una profesión mucho más socializada en la que el médico era uno de los que tomaba decisiones realmente importantes y a los que se les preguntaba para llevar a cabo acciones en tu propia vida, así que estas paredes guardan seguramente multitud de secretos».
Fernández concluyó su intervención con un mensaje de orgullo y admiración hacia los promotores del proyecto: «Desde la humildad, desde la premisa de que menos es más y a través de proyectos como este, debemos enorgullecernos de ser manchegos, de poder tener proyectos como este y gente con esta iniciativa».
Fernando Sánchez, el interiorista encargado del diseño del hotel, en colaboración con la arquitecta Inés Lucas, explicó la filosofía detrás del proyecto: «Hemos tratado de resaltar lo auténtico y lo original de la casa, creando habitaciones cómodas y adaptadas al siglo XXI, para que los huéspedes puedan disfrutar de la experiencia de alojarse en un lugar histórico sin renunciar a las comodidades que a menudo se echan de menos en este tipo de establecimientos».